Una pregunta que muchas personas me hacen es: ¿Por qué no bajo de peso? y lo primero que me dicen es: yo como bien, ya deje el pan, la tortilla, cero carbohidratos y nada, ni un gramo bajo. Y la respuesta es muy simple: no sólo somos calorías, somos seres integrales y es igual de importante lo que comes, lo que piensas y lo que sientes. Por esta razón,  hay muchos factores que pueden estar influyendo en tu peso, te proporciono los 5 principales:

1. No beber agua: El agua es una herramienta fundamental para fomentar un mejor metabolismo de las grasas. Un estudio demostró que beber 500 ml de agua aumentaba la termogénesis (producción de calor) en un 30%. Este aumento de la actividad metabólica antes de una comida ayudará a una digestión más eficiente y al metabolismo de las grasas.
Exprime un poco de jugo de limón fresco en el agua unos 20 minutos antes de una comida para un refuerzo extra de quema de grasa. Recuerda no tomar agua fría siempre tibia o a temperatura ambiente.

2. No dormir bien: El sueño es cuando recuperas tus músculos, desintoxicas tu cuerpo, equilibras tus hormonas, relajas tu mente y preparas tu cuerpo y tu mente para el siguiente día. No dormir bien puede hacer que te sientas letárgico (a) al día siguiente y tengas más posibilidades de comer en exceso debido a un aumento de la hormona ghrelina, la hormona que aumenta el apetito. Puedes haber notado que tienes más hambre el día después de una noche de insomnio. Eso no es solo tu imaginación; realmente tienes más hambre debido a cambios hormonales en tu cuerpo.

3. Altos niveles de estrés: Así es el estrés esta completamente relacionado con la producción de cortisol y este puede ser tu mejor amigo o tu mayor enemigo. El cortisol es una hormona esteroide, que es producida por las glándulas suprarrenales y desempeña un papel en la respuesta de lucha o huida, es decir, una acción fisiológica que prepara a tu cuerpo para luchar contra el peligro o correr por tu vida. Los aumentos de cortisol también se producen en respuesta al estrés crónico, de todos los días. Cuando el cortisol es demasiado alto durante demasiado tiempo, puede aumentar la cantidad de grasa que tienes en tu vientre (también llamada grasa visceral).

4. Alto consumo de azúcares refinadas: Cuándo se ingieren harinas refinadas, el organismo reacciona ante una invasión de azúcar rápida en la sangre, haciendo que el páncreas libere insulina y otra de las reacciones es que se deja de generar glucagón (hormona que actúa en el metabolismo del glucógeno), también llamada “la hormona del ayuno”, porque es la hormona que se encarga de que no se sienta hambre. De inmediato, se realiza la glucólisis (glicólisis) que es la vía metabólica que se encarga de la oxidación de la glucosa para obtener energía para las diferentes funciones del cuerpo, pero en este caso, al producirse en exceso y tan rápida liberación al cuerpo, este no consigue quemarlo y lo acumula en forma de grasa.

5.No ser Feliz: Este último factor esta muy relacionado con el punto 3, ya que cualquier tipo de depresión tiene un impacto negativo en los neurotransmisores que son responsables del control de estado de ánimo, el apetito, el pensamiento y el comportamiento general de una persona. Por ende si estas deprimido o no eres feliz es muy probable que lleves una mala dieta, que no te guste hacer ejercicio y lo peor de todo, que al suceder esto tu cuerpo también se estresa y libera cortisol lo cual lleva al aumento de peso.

Revisa como estas en cuestión de estos 5 factores, el arreglo de alguno (s) de ellos te pueden dar resultados muy favorecedores.

¡Un fuerte abrazo!
Mitsue Hanae